sábado, 26 de febrero de 2011

A CIERTA EDAD

   
"A CIERTA EDAD"
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Dicen algunos que, a cierta edad, después de los 60, nos hacemos invisibles, que nuestro protagonismo en la escena de la vida declina, y que nos volvemos inexistentes para un mundo en el que sólo cabe el ímpetu de los años jovenes. Yo no sé si me habré vuelto invisible para el mundo, es muy probable.

Pero nunca como hoy fui tan consciente de mi existencia, nunca me sentí tan protagonista de mi vida, y nunca disfruté tanto de cada momento como ahora.  Ahora se que no soy la princesa del cuento de hadas y que no necesito que me venga a salvar un príncipe azul en su caballo blanco, por que ni soy una princesa, ni vivo en una torre, ni tengo a un dragón que me esté custodiando.

Hoy me reconozco mujer, capaz de amar. Se que puedo dar sin pedir, pero también se que no tengo que hacer nada, ni dar nada que no me haga sentir bien.  Por fin encontré, hasta ahora, al ser humano que sencillamente soy, con sus miserias y sus grandezas.  Descubrí que puedo permitirme el lujo de no ser perfecta, de estar llena de defectos, de tener debilidades, y de equivocarme, de no responder a las expectativas de los demás y hasta hacer algunas cosas indebidas.

Y a pesar de ello, sentirme bien. Y por si fuera poco, saberme querida por muchas personas que me respetan y me quieren por lo que soy, si,...así un poco chalada, medio mandona y muchas veces terca. También cariñosa, habladora, besucona, abrasadora y a veces por algún motivo, triste, por que también tengo mis momentos tristes, esos en que pongo mi cara larga con un aire de pensadora y me da por llorar.

Cuando me miro al espejo ya no busco a la que fui en el pasado,...sonrío a la que soy hoy,... me alegro del camino andado, y asumo mis errores ¡Qué bien no sentir ese desasosiego permanente que produce correr tras los sueños! ¡ Qué bien! ya aprendí a tener paciencia. El ser humano tarda mucho en madurar,...¿ Verdad ? Sólo quiero dejarla correr. No quiero pedirle nada. Sólo quiero tener lo que yo me busque, sólo quiero lo que yo merezca

martes, 22 de febrero de 2011

LAS PIEDRAS DEL CAMINO

                                                                       
                                                                              

"LAS PIEDRAS DEL CAMINO"
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La piedra, es elemento terrenal que nos rodea. El mismo que puede ser visto de muchas formas, como la misma vida lo es...El distraído tropezó con ella, otros la convierten en su trampolín de aventuras, para escalar. El violento la utiliza como arma quizá sin saber que puede ser más rocosa su mente y su existencia... El emprendedor, construye con ella. Se convierte en el refugio de reyes, príncipes, gobernadores, se vuelve una fortaleza y protección de su propia vida...

El campesino, el anciano y todo aquel que se siente cansado, la utiliza de asiento. Cuántas veces necesitamos de una roca donde reposar...Para los niños, se convierte en un juguete. Puede ser la mejor distracción del verano...David mató a Goliat, otros tantos civiles y guerreros también han muerto por ella. Y Miguel Angel le sacó la más bella escultura...En todos estos casos, la diferencia no estuvo en la piedra sino en el hombre.
"MORALEJA"
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No existe "piedra", en tu camino que no puedas aprovechar para tu propio crecimiento. Esas difíliles que cuesta superar, la que siempre se lleva en el zapato, la que nos golpea, es la misma que nos ayuda a descansar y proteger. Son nuestras acciones lo que cuentan. Por eso, les deseo valor y sabiduría para las piedras que vengan en este nuevo año y el resto de nuestras vidas.

miércoles, 9 de febrero de 2011

NADA CON DEMASIA

NADA CON DEMASIA
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Demasiado descanso nos entumece.
Demasiado ruido nos aturde.
Demasiada frialdad es indolencia.
Demasiada actividad es turbulencia.
Demasiada fineza es artificio.
Demasiado rigor es crueldad.
Demasiada audacia es temeridad.
Demasiada economía es avaricia.
Demasiado honor, esclavitud.
Demasiado ingenio perjudica.
Demasiada confianza nos pierde.
Demasiada franqueza nos daña.
Demasiada bondad es debilidad.
Demasiada complacensia, bajeza.
Demasiada cortesía es ridiculez.
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Pero una hora de INMENSO PLACER
sustituye, con tranquilidad, tres horas de
sueño perdido. El placer recompensa más
que el sueño. Por eso, no dejes pasar una
buena oportunidad de divertirte.
No abandones sus tres grandes e
invaluables amigas. La INTUICIÓN,
INOCENCIA, y la PRUDENCIA.
Y siempre recuerda: la vida no se
mide por los descansos que tomamos,
sino por los momentos que te roban
el aliento.
MORALEJA
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Una cosa buena llevada al exceso...
puede ser peligrosa y
volverse mala.

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A TODOS MIS SEGUIDORES Y VISITANTES, GRACIAS POR ESTAR AHÍ. UN ABRAZO, ANTONIA.